Cuando menos lo esperé ya te amaba. Enjaular mi corazón no sirvió de nada, me prohibí rotundamente enamorarme tan de repente, y he caído de rodillas a tus pies, me enamoré de tí, eso no debió pasar. Tu me miras como un juego y yo te amo de verdad. Esto no puede ser, mis heridas no han sanado, y otro golpe al corazón ya no lo soportaré. Tu manera de tratarme fue la trampa
No hay comentarios:
Publicar un comentario