1 de mayo de 2010


Al amor es a algo que nunca le temí. Siempre dispuesta a jugar sabiendo que me podía quemar, daba todo sabiendo que me podían lastimar y lo hacia sin dudar; dispuesta a dejar todo en ese juego que llamamos amor sabiendo que podía perder, podía ganar. Yo lo que quería era jugar, a mi modo jugar para ganar. Pero sé que cambio, todo cambio, siento miedo, tengo miedo. No sé porque es la primera vez que tengo miedo de sufrir, de dejar todo sin recibir nada a cambio; miedo a las mentiras, a las verdades; a lo que callas a lo que dices; miedo de apostar todo en este gran juego del amor, de poner todas las cartas en la mesa y quedarme con nada, sin nada. Es la primera vez, y no sé porque que tengo miedo a enamorarme. Será la edad, serás tú, seré yo, será la herida que dejo un gran amor; no lo se, solo se que por mas que este miedo me invada quiero seguir.
No me importa nada, solo quiero seguir jugando, por más que el miedo se haga presente al igual que las dudas y la inseguridad. Es un juego en el que solo hay que jugar, todo en la vida se trata de ganar o perder y a el no siempre lo vas a tener.

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